23 de noviembre de 2008

Promesas del Este. El foedus del 411.


No sé yo si la Historia se repite, pero por lo menos se parece.
Hace ya algunos meses en el post “Georgia y el país de los alanos: los cosacos cabalgan de nuevo”, a cuenta de la invasión relámpago de Georgia por parte de los rusos comenté que: “…a veces pienso que los tanques rusos podrían llegar, si quisieran, sin ninguna oposición militar seria, a las orillas del Mar del Norte. Todo seguido, por las amplias llanuras, pisando la hierba, desde por ejemplo Polonia o Hungría, hasta Holanda. Diciendo esto pensaba yo en las invasiones de los bárbaros que surgiendo de las profundidades de las estepas, acabaron avecindándose por las bravas entre nos, los felices y opulentos ciudadanos del Imperio Romano.
Unos días después un buen amigo, el cual de hecho es el único lector de los aproximadamente 300 habituales –como los de Leonidas- al que puedo recabar directamente su opinión sobre lo que aquí escribo, me acusó de ser un alarmista. En su opinión algo así sería impensable debido a los muchos intereses económicos que los rusos tienen en Occidente.
Estoy bastante de acuerdo con él, ya que no en vano somos unos buenos clientes, de los que vamos pagando lo que nos piden por mantener nuestro bienestar disfrutando de los recursos naturales que los rusos nos venden. La prueba de su aprecio es que por ahora ni nos amenazan mucho ni nos chantajean demasiado, al menos que sepamos o haya trascendido más allá de alguna chuleo ocasional del Zar Vladimir cuando alguna vez le han intentado dar lecciones de ética por parte de quien también tiene bastante que callar.


Como digo, mi amigo lleva bastante razón, en cuanto a las formas, pero en el fondo debemos recordar el foedus del 411.
Por este nombre se conoce el probable pacto entre el poder romano y los invasores alanos, vándalos, y suevos por el cual se repartieron la mayor parte de la riqueza de Hispania, es decir principalmente sus tierras y el dominio sobre sus gentes, excluyendo la Provincia Tarraconense, que permaneció por el momento bajo control de Máximo el promotor romano del pacto, que fijó allí su residencia.
Aquellos bárbaros, germanos e iranios, empujados por el hambre y la presión de los hunos, vinieron del Este e irrumpieron en una fecha tan entrañable como la Navidad del 406 por el puente de plata que les brindaba un Rin helado. Después de vagar algunos años por la Galia dedicados mayormente al pillaje, buscaban ahora donde asentarse y ver crecer a la descendencia. Las fuentes de la época dicen que se echaron Hispania a suertes, lo cual no debe significar tanto una lotería como que se repartieran lotes (sortes) en relación a su poderío militar y al prestigio de sus caudillos. Los nómadas alanos, que se llevaron la parte del león, preferirían espacios para pastorear sus rebaños, en cambio de los suevos se dice que mudaron enseguida que pudieron la espada por el arado allá en la alejada Gallaecia, aunque más bien creo que labrarían sus recién adquiridas propiedades con la espada al cinto, a juzgar por su historia inmediatamente posterior.


En definitiva, las defensas fronterizas romanas estaban quebradas, pienso que no tanto en cuanto a su capacidad militar como a su moral y a su economía, pues los invasores aunque impetuosos y asalvajados tampoco fueron tantos. Aunque sobre todo contaron con padrinos y patrocinadores entre las desunidas filas de las élites de un Imperio Romano en crisis.


No olvidemos que Europa al fin y al cabo es tan solo, geográficamente hablando, un apéndice de las estepas Euroasiáticas. E históricamente y con la perspectiva suficiente, una continuación del Imperio Romano.
Por eso si ahora vienen los de Lukoil a intentar comprar nada menos que Repsol-YPF es porque en el fondo estamos hablamos de lo mismo: de fronteras expeditas, potencia militar dispar, quiebra moral y pactos.
Hemos vivido por encima de nuestras posibilidades, comprando en Asia lo que no producíamos dentro y acumulando deudas. Los bancos quieren cobrar, pues no están nunca para perder dinero, el Gobierno quiere que cobren, pues no gobierna para que los bancos pierdan dinero.
Los bárbaros ahora son ricos, tienen nuestro dinero, y por si no lo queremos reconocer y no estamos dispuestos a llegar a un pacto, también son poderosos. Ah, y además antes como ahora, tienen buenos amigos, con intereses comunes, en la Tarraconense

16 de noviembre de 2008

La verdadera destreza. La aportación española a la Historia de las artes marciales.


Si Okinawa es la clave para entender cómo, hasta que punto, cuando hablamos de Cultura, los conceptos de Oriente y Occidente pierden realmente sentido a través de algo considerado tan oriental como las Artes Marciales, el método, más bien la ciencia, de la Verdadera Destreza, es el vértice donde confluyen Historia, Cultura, Artes Marciales y la negación acomplejada hija del desconocimiento de nuestra valiosa herencia cultural.


A menudo buscamos referentes y místicos en el Lejano Oriente cuando tan solo con escarbar en nuestra cercana tradición descubrimos cosas tan sorprendentes como que la exótica tempura que modernamente hemos incorporado a nuestros yantares, no es ni más ni menos que un ibérico rebozado de toda la vida, llevado a Japón por los jesuitas portugueses y españoles allá por el s. XVI. Y que ahora nos vuelve.


Aunque, si bien como ya hemos visto, el pankration griego nos puede llevar directamente desde la Antigüedad Clásica al kárate de nuestros días, la Verdadera Destreza, resulta en si, en este aspecto, una pista falsa en el camino desde Occidente a Oriente de las Artes Marciales.

¿En qué consiste la Verdadera Destreza?

La Verdadera Destreza es un método de lucha, de lucha con espada, basado en las enseñanzas y la obra de Don Jerónimo Sánchez de Carranza, autor del libro De la Filosofia de las Armas y de su Destreza y la Aggression y Defensa Cristiana (1569).
Este sistema basado en la razón, la geometría y las matemáticas y que más allá de un manual de lucha es un compendio filosófico y moral, fue desarrollado por Don Luís Pacheco de Narváez, maestro de armas del rey Felipe IV de España, a través de sus once obras publicadas.
El método acabaría por convertirse en la principal escuela de esgrima española, imponiéndose a la denomina Destreza Común, vigente hasta el momento. Tuvo y tiene una gran influencia y difusión. Tanto es así que aún hoy en día se ofrecen seminarios y hay quienes debaten sobre su influencia en otras Artes Marciales orientales, como la Eskrima de Filipinas, aunque he aquí la pista falsa a la que nos referíamos.
España tuvo dominio de varios siglos sobre las Islas Filipinas, de donde es originario este Arte Marcial, cuyos practicantes manejan con contundente destreza un bastón corto. Si de algún modo recibieron influencia de la esgrima española, esta más bien tuvo que provenir de la esgrima común de la soldadesca y la marinería que se batió por aquellos lares, más que de la Verdadera Destreza, más extendida entre los espadachines civiles en sus lances y reyertas a punta de espada ropera.

¿Cómo se llega desde el olímpico Pankration a la Verdadera Destreza española?

Al respecto de todo esto y centrándonos en la propia Europa, si el pankration griego es el bisabuelo del kárate y si la Verdadera Destreza es en cierto modo similar al famoso Hagakure (el libro secreto del samurai japonés, escrito en el siglo XVIII); si la cultura y las artes están en el fondo tan interconectadas, ¿cómo se explica la evolución tan dispar entre las Artes Marciales asiáticas y las europeas, las cuales hemos tenido que importar ante la aparente carencia (más bien desconocimiento) que sufrimos?
La respuesta la hallamos en primer lugar en que en Europa, como en todos lados, la cultura se adapta a las necesidades. De este modo las Artes Marciales europeas siguieron una evolución paralela a la de las tecnologías aplicadas al arte de la guerra, quedando tempranamente relegadas las técnicas de lucha con la mano desnuda, así como en su momento, la esgrima sería arrinconada por las armas de fuego.


Es reveladora la historia de la práctica desaparición del pankration de la faz de Europa. En Grecia, el permanente estado de guerra entre las polis condujo a que el final sólo pudiera quedar una, y esa una no sería ninguna de las ciudades helenas, ni siquiera ninguno de los esquejes de cultura griega que desde Ampurias al Ponto prosperaban alrededor del Mediterráneo. Sería una Roma militarista e imperial aunque en cierto modo desde sus orígenes muy en deuda con la cultura griega que acabaría por liquidar.
Ya en época romana, el pankration se vería rebasado por la violencia y el sucio negocio de las sangrientas luchas de gladiadores para ser finalmente apuntillado por las beatas prohibiciones de los inmorales emperadores bizantinos cristianos, sobre todo lo que oliera a juegos paganos.
No cabe duda de que los deportes y entretenimientos son el reflejo del estado moral de una sociedad (pensemos sino en el fútbol contemporáneo…).


Para finalizar y relacionada con todo esta historia, una película, Los Inmortales (Highlander), 1986.
Vale, está llena de anacronismos, pero algo debían saber los guionistas de todo este rollo que os he explicado. Y además me gusta mucho.
Os pongo dos trocitos, el segundo sólo lo he encontrado en inglés (sorry). Aquí un maestro de armas español, encarnado por Sean Connery, adiestra al escocés Connor MacLeod en el manejo de la espada, porque al final, “sólo puede quedar uno”.
Además, fijaos que el arma que lleva Juan Ramírez Sanchez-Villalobos es, ¡una katana japonesa! Ni más ni menos: esto sí que es transmisión cultural.



Para saber más (y mejor):
*Asociación Española de Esgrima antigua: Las Escuelas de Esgrima Españolas La "Verdadera Destreza" y la "Esgrima Común": http://www.esgrimaantigua.com/EsgrimaComun.php
*La verdadera Destreza: http://en.wikipedia.org/wiki/Destreza
*Luis Pacheco de Narváez: http://es.wikipedia.org/wiki/Luis_Pacheco_de_Narv%C3%A1ez
*Jerónimo Sánchez de Carranza: http://es.wikipedia.org/wiki/Jer%C3%B3nimo_S%C3%A1nchez_de_Carranza
*The Influence of Spanish Renaissance Swordsmanship on Filipino Martial Arts? by John Clements: http://www.thehaca.com/essays/influence.htm
*Martinez Academy of Arms SPANISH MARTIAL ARTS WEEKEND, http://www.martinez-destreza.com/spanish2005/

2 de noviembre de 2008

LAS CRÓNICAS DE UN ASUNTO CASI OLVIDADO. Parte 25.

CAPITULO VII.
La máscara.

Pasaron varias semanas sin saberse nada más de Gamisans. Ni siquiera venía por la tienda. Entre tanto, Gonzalo había podido leer, también él, el libro del Profesor Olagüe, pues el anticuario lo había dejado bien visible en una estantería del despacho de la trastienda. Gonzalo no era historiador, pero pudo comprender claramente el contenido heterodoxo de la obra y lo que ella tenía de revolucionario, no sólo en cuanto a la teoría en sí, sino a los argumentos científicos y multidisciplinares en que se sustentaba su construcción. Aunque bien claro, el contenido era muy denso y costaba asimilar la multitud de datos que aportaba. Para ayudarse dispuso en una habitación de su piso un tablón de corcho y organizó en él los datos colgando pequeñas fichas, como si estuviera estructurando una investigación criminal. No en vano, Gonzalo se consideraba a sí mismo un cachorro de investigador privado, aunque sabía muy bien que la mayoría de los encargos que recibiría, una vez que acabados sus estudios consiguiera la licencia, serían bastante más mundanos.
De ese modo, cada tarjeta colgada correspondía a las pruebas o evidencias que el libro aportaba a favor de la teoría del autor. Pruebas a favor, pruebas en contra, refutaciones, preguntas y dudas que cuando le fuera posible pensaba plantearle a su amigo Andrés. Todo ello conformaba un intrincado esquema dividido en varias áreas donde las tarjetas de colores, escritas con rotulador, colgaban en grupos, una bajo la otra, siguiendo la estructura de la obra. Gonzalo estuvo meditando largamente sobre todo ello mientras miraba una vez más su tablón. Era su forma de darle vueltas al asunto y analizarlo.
Desde la izquierda, en la parte de arriba, la primera cartulina comenzaba por constatar la situación de crisis climática, de pulsación como decía el texto: ¡Una de las fases de desecación severa se confirmaba que acaeció precisamente entre los siglos VII y VIII d.C.! Según el libro, afectó con fuerza a toda la cuenca del Mediterráneo. Las tensiones sociales y las luchas religiosas se complicarían a causa de esta crisis y estallarían conflictos y guerras: en Oriente el Imperio Bizantino acabaría perdiendo gran parte de sus territorios y el Imperio Persa caería en manos islámicas. Sin embargo, en Occidente una revolución interna que condujo a una larga guerra civil terminaría por quebrar la alianza del Estado Visigodo con la Iglesia Católica, iniciándose la metamorfosis del cristianismo unitario arriano y del Reino Visigodo de Toledo en el Califato islámico que bien conocemos. Según esto, los árabes no habrían invadido España y la llegada del Islam a la Península se produciría a través de una lenta destilación, un cambio que transformó el arrianismo en Islam. ¡Ahí era nada!

Sin embargo, era esta evolución de las ideas religiosas, lo que el profesor Olagüe denominaba “idea fuerza”, aquello que más traía de cabeza a Gonzalo.
-Difícil de comprender lo del sincretismo arriano y cómo el arrianismo fue deviniendo islamismo –murmuró para sí mismo, pasando sus dedos por las últimas cartulinas del extremo derecho del tablón antes de salir de aquella habitación que empezaba a considerar su despacho.

Pensó que lo mejor sería esperar al viernes e invitar a su amigo Andrés a cenar al piso, y ponerle delante de su esquema para comentarlo más en profundidad. Además tenía alguna novedad importante que contarle sobre algo que le había pasado. Sin embargo, cuando le telefoneó notó a su colega un tanto desanimado, pero lo achacó a que quizás estaría preparando alguno de sus trabajos para publicarlo y así apoyar su beca, y que se encontraría por ello algo cansado.

(continuará...)

*Si lo deseas, puedes leer por orden de aparición las partes anteriores publicadas de la novela, seleccionando "Las crónicas de un asunto casi olvidado" bajo el epígrafe TEMAS TRATADOS de la barra lateral izquierda.